Siempre hemos dicho que las mejores experiencias se viven en alojamientos que tengan una situación privilegiada, porque facilitan las sensaciones que viváis en vuestros dos días de huida de la rutina. Y el Hotel El Cid está enclavado en un entorno excepcional. Desde las bonitas habitaciones podréis contemplar un espléndido paisaje de las montañas que rodean la muralla. Y como las buenas noticias no vienen solas, alucinaréis con su desayuno continental, servido en un restaurante experto en cuidar los estómagos de sus clientes. Rendíos.